Cultura viva y corazón del Cibao
No todas las joyas del Caribe están bañadas por el mar.
Santiago de los Caballeros, conocida como la “Ciudad Corazón”, late con fuerza en el centro del Valle del Cibao. Moderna, hospitalaria y culturalmente rica, esta ciudad es un retrato genuino de la República Dominicana más auténtica.
Aquí, el viajero no solo visita, conecta.
Una ciudad con historia y orgullo
Fundada en 1495, Santiago es una de las ciudades más antiguas del Nuevo Mundo. Pero lejos de vivir del pasado, hoy vibra con vida moderna, arte, gastronomía y una identidad propia que sus habitantes defienden con pasión.
Lo que no puedes perderte:
- Monumento a los Héroes de la Restauración: símbolo icónico con vistas panorámicas de la ciudad, rodeado de arte urbano y espacios culturales.
- Centro León: uno de los museos más importantes del Caribe, donde se celebra el arte, la historia y la identidad dominicana.
- Catedral Santiago Apóstol y calles del centro histórico, para caminar entre arquitectura colonial y moderna.
- Estadio Cibao: si viajas entre octubre y enero, vive la pasión del béisbol con las Águilas Cibaeñas y su inigualable fanaticada.
Una capital gastronómica
El Cibao es tierra fértil, y eso se traduce en una cocina con alma y sabor. Santiago es un festín para los sentidos:
- Prueba el auténtico sancocho cibaeño, el chivo guisado o el mofongo.
- Disfruta de cafés con origen local y postres tradicionales como el dulce de leche cortada.
- Recorre los bistros, food trucks y restaurantes gourmet que dan vida a su escena urbana.
Un punto de partida hacia el verde del norte
Desde Santiago puedes explorar todo el norte del país con facilidad:
- A solo una hora están las montañas de Jarabacoa y Constanza, ideales para turismo ecológico y de aventura.
- También puedes combinar tu viaje con escapadas hacia Puerto Plata, La Vega o la Ruta del Tabaco.
Santiago, más allá de lo turístico: una ciudad para sentir
Con nosotros, puedes explorar Santiago desde su esencia local:
- Tours culturales por barrios icónicos como Los Pepines y La Joya.
- Rutas gastronómicas, talleres de arte o clases de merengue.
- Visitas a fábricas de tabaco artesanal, orgullo de la región.
